WASHINGTON (AP) — Una prohibición de viajes desde África occidental parece ser una respuesta simple y astuta al devastador brote de ébola allí a fin de evitar su propagación a otros países. En Estados Unidos, el tema se ha convertido en la demanda central de congresistas republicanos y de algunos demócratas y es popular entre la gente, pero los expertos de salud dicen casi inánimemente que es una mala idea que pudiera empeorar las cosas.