Un grupo de investigadores considera que el cerebro es sensible a la calidad de la salud del niño, según revela el estudio dirigido por las doctora de la Universidad de Montreal y publicado este martes en ‘Proceedings of the National Academy of Sciencies’. Los científicos han trabajado con niños de 10 años cuyas madres tenían síntomas de depresión a lo largo de sus vida descubriendo que la amígdala, una parte del cerebro que está unida a la respuestas emocionarles, era de tamaño superior.